¿Qué es la resiliencia digital?

Cómo lograr que mi empresa se pueda convertir en resiliente

¿Qué es la resiliencia digital? En este artículo veremos cómo lograr que nuestra empresa se pueda convertir en resiliente.

Los seres humanos y los sistemas que nos rodean son vulnerables. Para nadie es un secreto que la tecnología cada vez es más necesaria y relevante en nuestras vidas, y juega un papel determinante en situaciones complicadas o de vulnerabilidad.

Durante la pandemia, la tecnología ayudó a muchas empresas a superar situaciones limitantes convirtiéndose en empresas resilientes dentro del mundo digital. ¿Pero estaban todas las organizaciones preparadas y capacitadas para dar respuesta a la situación que se vivió en aquel momento? La mayoría de las empresas, no lo estaban.

¿Qué es la resiliencia digital? ¿Cómo lograr que mi empresa se pueda convertir en resiliente?

Según Dean Robb, autor de Building Resilient Organizations las organizaciones resilientes se caracterizan por “la capacidad de crear y disolver estructuras, proporcionar seguridad en medio del cambio, gestionar las consecuencias emocionales del mismo, y aprender, desarrollarse y crecer ante las dificultades”.

Una organización resiliente no sólo obtiene beneficios en tiempos difíciles. También camina sobre una buena base en lo que al uso de tecnologías se refiere, invirtiendo en automatización de tareas, creando una infraestructura digital apoyada en innovación, equipando tecnológicamente la transformación cultural de la empresa para así poder dar respuesta en cualquier circunstancia sea buena o mala.

Las empresas que de la mano de sus colaboradores sean capaces de enfrentarse a las adversidades del entorno, manteniendo sus indicadores de productividad, rentabilidad y sostenibilidad, son las que se pueden denominar resilientes digitales.

Según la norma ISO 22316, las organizaciones resilientes muestran cierto tipo de competencias básicas en todos sus colaboradores, tales como: perseverancia, orientación a soluciones y eficiencia en condiciones adversas, lo que las hace ser más resistentes ante el infortunio y más proactivas en el conocimiento del entorno y en la identificación de amenazas y oportunidades.

Estas organizaciones resilientes digitales tienen identificados sus riesgos por procesos y sus vulnerabilidades, lo que les permite vivir una cultura de prevención, con una alta capacidad de adaptación para manejar tiempos; se trata de organizaciones que no se detienen.

La resiliencia humana y la empresarial tienen una estrecha relación; no hay empresas resilientes sin personas resilientes; sus competencias, características y comportamientos están alineados con una visión, con un propósito compartido; se apoyan en la habilidad de absorber, adaptar y responder efectivamente a los riesgos e impactos del cambio, sobre todo lo que conlleva la transformación digital.

Cuando hablamos del mundo digital, es innegable que haya problemas de vulnerabilidad de los propios sistemas, por esta razón es tan necesario que al hablar de resiliencia digital hablemos de una buena estrategia de seguridad informática.

La digitalización conlleva asumir diversos riesgos. Debemos estar listos para cualquier ataque y no perder la continuidad del negocio.

Las empresas resilientes digitales deben ser capaces de seguir funcionando ante cualquier situación inesperada y si es negativa, deben tener la capacidad de sobreponerse y mantener la continuidad del negocio.

El objetivo no es construir grandes defensas sino ser capaces de anticiparse a las posibles amenazas y así lograr tener una sólida y eficaz capacidad de respuesta.

Reto:

Las empresas deben seguir trabajando en la automatización de sus procesos y en soluciones de software con el objetivo de blindar tecnológicamente sus propios procesos e impulsar que sean transparentes, productivas, que funcionen adecuadamente y que estén organizadas en diferentes entornos digitales.

En TechGenius Training sabemos por experiencia que para tener organizaciones resilientes es necesario contar con equipos bien capacitados, formados en las últimas tendencias tecnológicas, que sepan dar soluciones y acompañar los cambios con sólidos y prácticos conocimientos en el mundo IT, y con Soft Skills, imprescindibles para responder adecuadamente ante cualquier tipo de dificultad en un escenario desafiante y veloz como el actual.

Las organizaciones del hoy y del mañana deben construir procesos que inspiren seguridad, haciendo un uso confiable de la tecnología.